Fotografía en 3D

Las imágenes en tres dimensiones han vuelto a ponerse de moda. Las viejas técnicas para conseguir este efecto se apoyan en nuevos dispositivos y aplicaciones informáticas que facilitan la creación en entornos domésticos. Además, en función de la técnica utilizada, estas imágenes pueden verse mediante el uso de las clásicas gafas de dos colores, con las modernas gafas polarizadas o bien sin necesidad de ellas.

La fotografía en tres dimensiones (3D) no es un invento actual. Algunas de sus principales técnicas, como la estereoscopía, un método usado para crear una ilusión de profundidad en una imagen fija o en movimiento, se inventó en el siglo XIX. En la actualidad, e impulsados por la demanda de los consumidores para disponer de contenidos y pantallas en tres dimensiones, diferentes fabricantes de hardware y software han presentado sus propuestas para facilitar la recreación de este tipo de imágenes.

Los diferentes procesos van desde crear una imagen 3D a partir de otra en 2D, hasta el uso de dispositivos que permitan capturar una imagen directamente en tres dimensiones. La opción más sencilla es utilizar la estereoscopía, ya que puede realizarse con cualquier cámara de fotos sin accesorios adicionales. La sensación de profundidad se obtiene al capturar una misma imagen, pero desde el punto de vista de cada uno de los ojos.

Para ello, se realizan dos fotografías con un leve desplazamiento horizontal y se muestran de forma paralela para que el observador pueda cruzar un poco los ojos para visualizarlo. Sin embargo, esta técnica cansa la vista de forma rápida al forzar la musculatura del ojo y no todas las personas están capacitadas para someter a tanto estrés a sus ojos. Además, no es recomendable en niños ni en adultos con problemas de visión.

Otra de las opciones más utilizadas y sencillas consiste en realizar estas imágenes a una distancia de tres centímetros para unirlas luego mediante un programa de retoque fotográfico. De esta forma, las fotografías 3D se exponen sin necesidad de forzar la vista, ya que ambas se ven fundidas con un ligero desfase. Para su visualización, sin embargo, es necesario disponer de unas gafas de dos colores (azul y rojo).

Imágenes 3D