LAS
MUJERES FOTÓGRAFAS RECLAMAN SU SITIO
El
colectivo Género y Figura, creado en 2015, lucha por la visibilidad de las
creadoras. Forman parte del programa paralelo de Art Madrid 2016, dedicado al
arte y género.
La feria Art Madrid ha querido mantener abierto el debate del
papel de la mujer creadora. Por eso su programa paralelo se ha llamado este año “Arte y Género”, con
el objetivo de promover la visibilidad de las artistas. En esas actividades
participan desde expertas como Margarita de Aizpuru hasta ‘performers’ como
Yolanda Domínguez. Y también grupos como Género y Figura, un colectivo
feminista que empezó a trabajar el año pasado con el objetivo de reivindicar a
las mujeres fotógrafas, integrado, entre otras, por Miren Pastor, Eva
Filgueira, Davinia V. Reina y Nieves Limón.
Nieves
Limón, profesora de la Universidad Carlos III y miembro del área de
investigación de este proyecto, explica que “desde los años 90, cuando llegan
los estudios de género al ámbito académico, el foco empieza a ponerse en el
ámbito de los discursos históricos, como la Historia del Arte”. Añade que “las
barreras que encuentran las mujeres fotógrafas son las mismas que se producen
en otros ámbitos de trabajo, no hay una tipología específica para saber por qué
no se produce su conocimiento”. Ella misma da las claves para comprender por
qué sigue siendo necesario reivindicar el trabajo de la mujer en el arte.
El equipo de “Género y Figura” está
formado por investigadoras universitarias y otras compañeras interesadas en las
mismas líneas procedentes de otros ámbitos, como el diseño, la producción
audiovisual, la comunicación… Nació hace unos meses en una convocatoria pública
que abrió la Universidad Carlos III de Madrid con una plataforma de
micromecenazgo, Goteo, para intentar paliar los problemas que tienen algunas
líneas de investigación dentro de la investigación pública. Se podían presentar
ideas que tuvieran una explícita vinculación de cambio social, y el nuestro es
un proyecto feminista que intenta posicionar algunos debates y revertir la
situación de la mujer en el ámbito profesional de la fotografía.
Todas nos hemos desarrollado en el ámbito
fotográfico. Y en este desarrollo nos dábamos cuenta de que los libros a los
que acudíamos y las exposiciones que visitábamos siempre había una carencia de
fotógrafas, cuando en la práctica no era así. Primero de una manera intuitiva
ves que algo pasa, y luego te fijas en hechos como que el Premio Nacional de
Fotografía solo se ha otorgado en España a cuatro fotógrafas; el Hasselblad a
siete; ‘La voz de la imagen’, que reúne a los 21 maestros de la fotografía
española, solamente muestra el trabajo de tres mujeres… Hay algunas prácticas
que legitiman el medio, desde exposiciones a aproximaciones historiográficas,
que de alguna manera siempre terminan dejando de lado el trabajo de muchas
fotógrafas.
Al principio intentamos descubrir fotógrafas
que en España hubieran trabajado y a las que casi no se conociera, pero tuvimos
que dejar esta línea por la falta de financiación. Aun así encontramos nombres,
como el de la fotógrafa vasca Eulalia Abaitua, de finales del siglo XIX. Esto
tampoco solucionaba otro de los problemas que veíamos: que en la actualidad
también faltan nombres. Por eso creamos dos convocatorias para la edición de un
fotolibro y la producción de tres clips audiovisuales, y en nuestra web vamos a
alojar el trabajo de unas 50 fotógrafas de las 156 que se presentaron. Pero a
la vez mantenemos la investigación: hacemos artículos divulgativos y
colaboramos de manera abierta con un grupo de edición de Wikipedia en MediaLab
Prado para la traducción y creación de perfiles de mujeres fotógrafas.
Un libro
que nos parece fundamental por la selección que hace es “Mujeres fotógrafas: emancipación
y performance”, de la profesora italiana Federica Muzzarelli. En él
aparecen desde fotógrafas famosas como Diane Arbus o Anne Brigman y otras como
Hannah Höch, Madame Yebonde o Tina Modotti. Nos gusta la manera que tiene de
abordar la historia de la fotografía, no lo intenta hacer en un eje cronológico
y tampoco en ejes nacionalistas, porque eso deja zonas ciegas, parece que hay
áreas que nunca han tenido fotógrafas, y no es así. En España no hace falta
mirar atrás, actualmente hay una generación de fotógrafas a las que hay que
reivindicar: Lurdes Basolí, Miren Pastor, Cristina de Middel, Laia Abril, Bego
Antón…
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