LA FOTOGRAFÍA EN EL CINE
Tanto en el cine como en nuestra vida diaria, el arte de la fotografía siempre ha sido esencial e importantísimo. De la misma manera que cuando viajamos, estamos con amigos, queremos divertirnos haciendo fotos o queremos recordar algún hecho, realizamos fotografías para inmortalizar el momento en nuestra cabeza y plasmarlo en imagen.
Qué mejor placer que ver una fantástica puesta de sol llena de colores y contrastes.
Con el cine nos ocurre lo mismo. Gracias a la magia de algunas imágenes que vemos en la pantalla, nos quedan en la retina y podemos recordar diferentes escenas de películas con las que hemos disfrutado.
Los directores de fotografía hacen auténticas maravillas con las imágenes, y nos muestran paisajes, escenas cotidianas, luces, colores o sombras de maneras increíbles, que convierten una buena película en algo más.
Por
desgracia, algunas veces, son los grandes olvidados. Pero, que seria
de Terrence Malick sin un director de fotografía como Emmanuel
Lubezki,
o Clint Eastwood sin Jack
N.Green,
e incluso el genial Stanley Kubrick sin John
Alcott.
Estos geniales artistas tienen un papel importantísimo en el cine. Es difícil entender una película sin una buena iluminación detrás, para crear una atmósfera contextualizada con la época y el momento del filme.
Estos geniales artistas tienen un papel importantísimo en el cine. Es difícil entender una película sin una buena iluminación detrás, para crear una atmósfera contextualizada con la época y el momento del filme.
Os
queremos recordar algunos de los mejores directores de fotografía de
cine, que gracias a su arte han complementado grandes películas con
su perfecta manera de captar imágenes.
Colores, luces, sombras y tinieblas es de lo que está hecho el cine.
– Billy
Bitzer:
Considerado el primer director de fotografía, tuvo junto al director
David W.Griffith una larga participación en películas. Cintas como
“El
nacimiento de una nación”
(1914) o “Judith of Bethulia”, donde juega con contraluces y una
iluminación difusa, consigue una poética visual, en unos años en
que la fotografía en blanco y negro, tenia una gran importancia en
películas mudas.
– Nestor
Almendros:
Realizando sus mejores trabajos en Francia, con la Nouvelle Bague.
Ganándose el respeto con cintas como “La
historia de Adéle”
(1975), pasó a Estados Unidos para realizar filmes como “Kramer
contra Kramer”
(1981) o “Días del Cielo” (1978) con Terrence Malick. Fotógrafo
que le da mucha importancia a la luz natural y a los paisajes
abiertos.
– Christopher
Doyle:
Habitual en trabajos llegados de oriente, colaborador de Wong-Kar Wai
o Zhang Yimou, con cintas como “Ashes
of time”
(1994) o “Hero” (2002) nos llena la pantalla de unos fantásticos
colores y contrastes cromáticos.
– Gregg
Toland:
Innovador tecnológico, realizó un trabajo muy potente con
“Ciudadano
Kane”
(1941) con aperturas de lente, cargada de sombras y luces increíbles.
– John
Toll:
Creador de fantásticos paisajes en cintas como “Braveheart”
(1995) o “La
delgada línea roja”
(1998), donde uno puede sumergirse en la naturaleza que nos muestra
con cielos infinitos, paisajes llenos de color y vida.
CONTRATADO Y RESCATADO DE:
No hay comentarios:
Publicar un comentario